Identidad Biométrica en México: ¿Avance Tecnológico o Riesgo a la Privacidad?

El reciente anuncio de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la creación de una Plataforma Única de Identidad ha encendido el debate entre innovación tecnológica y protección de derechos fundamentales. La propuesta incluye una nueva versión de la CURP que integrará fotografía y huellas dactilares desde el nacimiento, con el objetivo principal de combatir la crisis de desapariciones en México.

Pero ¿qué implicaciones legales tiene esta iniciativa? ¿Y cómo deben prepararse tanto ciudadanos como empresas para este cambio?

¿En qué consiste esta nueva CURP?

La CURP biométrica será un documento digital que almacenará datos personales y biométricos (foto y huellas) en una plataforma centralizada. Esta identidad digital estará conectada con diversas bases de datos como:

• Alerta Amber

• Registro Nacional de Personas Fallecidas No Identificadas

• Registro de Fosas Comunes y Clandestinas

• Carpeta de Investigación de personas desaparecidas

El objetivo, según el gobierno, es facilitar la localización e identificación de personas, especialmente en casos de desaparición, y compartir información en tiempo real entre instituciones.

Implicaciones legales y preocupaciones sobre privacidad

Desde un punto de vista jurídico, la creación de una identidad biométrica nacional plantea desafíos relevantes:

1. Protección de datos personales

Los datos biométricos son considerados datos sensibles por la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares (LFPDPPP). Su recolección, uso y almacenamiento requieren consentimiento expreso, medidas de seguridad avanzadas y una justificación clara de interés público.

2. Riesgo de uso indebido

¿Quién tendrá acceso a esta base de datos? ¿Cómo se garantiza que no será utilizada con fines distintos a los anunciados, como control migratorio, persecución política o vigilancia masiva?

3. Responsabilidad en caso de filtración

En caso de vulneración o filtración de esta base de datos, el daño sería irreversible. No se pueden “cambiar” las huellas digitales o el rostro de una persona como sí ocurre con una contraseña.

¿Qué deben considerar las empresas y profesionales?

En especial, empresas del sector médico, financiero o legal —como nuestros clientes en Gil y Solís, Abogados— deben:

• Actualizar sus políticas de privacidad y manejo de datos personales si llegan a vincularse con esta nueva CURP.

• Estar atentos a nuevos lineamientos del INAI, que sin duda jugará un papel clave en la vigilancia de esta plataforma.

• Capacitar a su personal en compliance y protección de datos ante el uso de esta información en contrataciones o validaciones de identidad.

La CURP biométrica representa un avance tecnológico sin precedentes en México. Pero también nos recuerda la importancia de tener un marco legal sólido, transparente y preventivo que garantice que esta herramienta no se convierta en un riesgo para la privacidad individual.

En Gil y Solís, Abogados, seguiremos monitoreando esta iniciativa para asesorar a nuestros clientes en su correcta implementación y cumplimiento normativo.